Cuidado con el uso del brasero
Con la llegada del frío, muchas familias paraguayas recurren al brasero, bebidas calientes y vapores caseros para combatir las bajas temperaturas. Sin embargo, estas prácticas, si no se realizan con precaución, pueden convertirse en peligros latentes dentro del hogar.
Los principales riesgos están relacionados con quemaduras por contacto con braseros o líquidos calientes, intoxicación por monóxido de carbono y accidentes domésticos, especialmente en hogares con niños. El hacinamiento típico en días fríos agrava aún más esta situación.
Las autoridades sanitarias recuerdan no usar braseros en habitaciones cerradas, ya que el monóxido de carbono es un gas letal, incoloro e inodoro, que puede causar la muerte en minutos. Siempre se debe ventilar el ambiente dejando una puerta o ventana entreabierta.También se advierte sobre el uso de agua muy caliente para el mate o los baños de niños pequeños. El agua debe ser templada primero, y nunca debe dejarse a los niños manipular grifos o termos sin supervisión.
El uso de vapores caseros para aliviar enfermedades respiratorias puede provocar quemaduras graves si se derraman o se exponen directamente al rostro.En medio del invierno, la prevención es clave: nunca dormir con un brasero encendido y siempre apagar el fuego con agua, no con arena.
