Derrotado, pero soberbio: “Se marchó” Miguel Prieto
Sabiendo muy bien que era su último día en la Municipalidad, se retiró esta mañana sin soltar su ínfula de grandeza el intendente, suspendido por corrupto.
Miguel Prieto reconoció que suspendió “de onda nomás” el servicio de los buses eléctricos y admitió que dio de manera ilegal “ayuda social” al marido de la concejal María Portillo y a la directora de Talento Humano, “Belu” Zarza.
No pagó el salario de mayo y “espera que el interventor lo haga”.
No estuvieron en su “retirada” los dos diputados y el senador de su movimiento. Al salir, fue abucheado por sindicalistas de la “carpa de la resistencia” y escrachado en redes sociales por su propia gente.
Fue el final de su era, pues la Cámara de Diputados debe destituirlo ante la montaña de evidencias de corrupción en su contra.