Gobierno deja entrever que no construirá el Gran Hospital del Este y abre la puerta a una fusión silenciosa de Salud e IPS
A pesar de haber sido una de las promesas más esperadas por la ciudadanía del Alto Paraná, la construcción del Gran Hospital del Este se va diluyendo en medio de desentendimientos políticos, falta de gestión técnica y una nueva estrategia del Gobierno que apunta a fusionar los servicios del Ministerio de Salud y el IPS en la región.
Este viernes 28 la ministra de Salud, María Teresa Barán, llegó de forma silenciosa a Ciudad del Este y se reunió con autoridades del IPS y de la Fundación Tesãi. Aunque no hubo anuncio oficial sobre su visita ni declaración posterior, trascendió que el encuentro tuvo como finalidad reactivar el proyecto de fusión entre Salud e IPS, iniciado en 2020.
La discreción con la que se manejó la presencia de la ministra y el tenor reservado de las conversaciones alimentan la sospecha de que el Gobierno está optando por un camino alternativo, abandonando de hecho –aunque no oficialmente– la idea de levantar un nuevo hospital de referencia en el Este del país.
Las verdaderas razones detrás del abandono
El Gran Hospital del Este fue anunciado con entusiasmo por el presidente Santiago Peña en octubre de 2024, quien incluso afirmó que el Estado ya contaba con un terreno de seis hectáreas para iniciar las obras. Sin embargo, varios factores explican por qué esta promesa no se materializó:
- Falta de proyecto técnico
Fuentes consultadas confirmaron que Itaipú nunca desembolsó fondos para el hospital porque el Gobierno nunca presentó un proyecto formal con los costos estimados, diseño arquitectónico, equipamiento necesario ni nivel de complejidad requerido. Sin proyecto, no hubo presupuesto. - Disputas políticas por la ubicación
El proyecto tampoco contó con un consenso político claro sobre el lugar de construcción. Mientras los diputados altoparanaenses insistían en que debía erigirse en Ciudad del Este, el gobernador César “Landy” Torres (ANR) presionó para trasladarlo a la zona sur del departamento. Este desentendimiento fue aprovechado por la diputada Cristina Villalba (ANR-Canindeyú), quien propuso que el hospital sea construido en Curuguaty, al norte del país. - Nueva lógica de cobertura regional
Técnicos del Ministerio de Salud habrían argumentado que con la reciente habilitación del hospital regional de Coronel Oviedo, gran parte de la zona centro-este del país ya está cubierta. La zona sur cuenta con el hospital de Encarnación, quedando un vacío en la zona norte, que ahora podría ser cubierto con la propuesta de levantar el nuevo hospital en Curuguaty. - Itakyry, una idea que nunca prosperó
En su momento, incluso se había planteado construir el Gran Hospital en la zona norte de Alto Paraná, específicamente en Itakyry, propuesta hecha por un candidato a gobernador, pero que nunca fue considerada seriamente a nivel nacional.
¿La fusión como salida política?
Ante este escenario, la reactivación del plan de fusión entre Salud e IPS aparece como una estrategia para justificar la cancelación del hospital. Unificar servicios, compartir recursos e “integrar la red sanitaria” permitiría al Gobierno presentar una aparente mejora del sistema, sin necesidad de construir nueva infraestructura.
Pero esta decisión dejaría a Alto Paraná –el segundo departamento más poblado del país– sin el hospital de alta complejidad tantas veces prometido. Además, pondría en riesgo la autonomía de Tesãi, fundación que hasta hoy ha operado con un perfil técnico y administrativo propio.
Por ahora, el silencio del Gobierno sobre el destino final del Gran Hospital del Este y la ausencia de transparencia en las decisiones refuerzan la percepción de que la promesa fue abandonada en favor de otros intereses, tanto técnicos como políticos.